¿Sabías que los seguros de inversión pueden darte rendimientos exentos de impuestos? Esto es posible gracias a la Ley del Impuesto sobre la Renta (LISR), que establece que los rendimientos obtenidos de los seguros de inversión no se consideran ingresos acumulables para efectos fiscales.
En este blog post, te explicaremos cómo funcionan los seguros de inversión y cómo puedes aprovechar sus beneficios fiscales.
¿Qué es un seguro de inversión?
Un seguro de inversión es un producto que combina las ventajas de un seguro de vida con las de un plan de inversión. Los clientes de un seguro de inversión pueden elegir entre una amplia gama de alternativas de inversión, desde fondos de renta fija hasta fondos de renta variable.
Los rendimientos obtenidos de los seguros de inversión se generan a través de la inversión de las primas que pagan los clientes.
Beneficios fiscales de los seguros de inversión
La LISR establece que los rendimientos obtenidos de algunos seguros de inversión que complan con los requisitos no se consideran ingresos acumulables para efectos fiscales. Esto significa que los clientes de estos seguros de inversión no tienen que pagar impuestos sobre los rendimientos que generan sus inversiones.
Para que los rendimientos de un seguro de inversión sean exentos de impuestos, se deben cumplir los siguientes requisitos:
El seguro debe estar contratado con una institución autorizada por la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF).
El contratante debe de ser quien pague las primas.
El plazo de vigencia del seguro debe ser de al menos 5 años.
El contratante debe de contar con al menos 60 año cumplidos al momento de realizar del retiro.
Los seguros de inversión son una excelente opción para las personas que buscan invertir su dinero y obtener rendimientos exentos de impuestos.
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